El primer día del resto de mi vida.


Abrí la carta con cierta emoción, no exenta de voy a llamarle curiosidad y un poco de inquietud. Fui leyendo con toda la lentitud que me permitieron los nervios que, quien me lo iba a decir, después de tanto cavilar aun me quedaban.

La carta estaba escrita con una extrema gramática y una expresividad fuera de toda duda. Sin embargo no prestaba mucha atención a su contenido hasta que me encontré con la frase que, desde que la abrí, estaba buscando: INVALIDEZ ABSOLUTA permanente para todo trabajo. ¡¡¡ Por fin, soy pensionista !!!. Y no es muy difícil, solo me ha costado cotizar 36 años y tener Esclerosis Múltiple. Si el que no se consuela es por que no quiere. Hay que ponerle un poco de humor a todo.

¿Y ahora que?, me pregunto. Ahora creo que seguiré con la vida que tengo porque, en el fondo, me gusta. Si a parte de m mujer, a quien ya le he escrito y le escribiré en este blog, me gusta la gente que tengo alrededor, las cosas que me ver (aunque sean difuminadas9. Me gustan las cosas que puedo sentir, oler, tocar, escuchar. Me gusta el Universo que se esta abriendo ante mi. Y me gusta porque me ha dado otra dimensión del tiempo. No tengo prisas, disfruto tanto de los días de sol como de la belleza de una tormenta. Nada me hace pequeño, nada me hace distinto. Soy cada vez más libre a pesar de que la EM sigue progresando. Pero, no se como explicarlo, ha abierto un camino nuevo en mi mente, un camino que hoy empiezo a andar. Quizás los demás vean que lo ando cada vez con más torpeza pero no es así. Cada vez vuelo más alto y eso que solo llevo un día de pensionista.
  • Mientras escribo esto, estoy escuchando: Show me the way (Peter Frampton)

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