Mas sabe el loco en su casa....

Hay verdaderos genios de la palabra escrita, solo hay que leer su obra y dejarte llevar por ella. Hay obras pictóricas que, con su sola contemplación, te transportan a otros mundos. Pero ambos, el escritor y el pintor, al igual que todo el que crea, se dejan llevar por sus sentimientos, además de por su técnica, en el momento de su creación.

Pero, ¿es la misma belleza, la que ellos plasmaron en su escrito o en su cuadro, la que nosotros vemos, la que sentimos?. No, decididamente,no. El sentimiento ha de ser diferente por fuerza por que ellos fueron únicos al crear y nosotros, aunque sea una prepotencia, somos únicos al mirar. Tu eres única, único al sentir. En eso somos tan iguales y tan diferentes, como seres únicos que somos. Como cualquier ser que puebla este increíble planeta. Y si es así, ¿por que hay tampoco respeto entre nosotros?,¿por que nos destrozamos los unos a los otros si nadie es igual a nadie, si una pérdida es irreparable?.

Tenemos tan poco respeto por los demás que presuponemos, una persona con una enfermedad, ya nos es valida para la sociedad, ya no produce beneficios. Presuponemos que una persona con Esclerosis es incapaz de mirar un cuadro y comentarlo. Si tiene problemas para hablar, si va en una silla de ruedas, ¿que nos puede enseñar?. Si, le añades que es mujer, todos absolutamente todos los prejuicios hipócritas de una,hipócrita sociedad, salen a la luz.

Solo puede hablar, escribir, sentir, sobre su enfermedad, no mezclarse ni salir del gueto donde esta confinada, confinado. Si alguna vez miró un cuadro y sintió, debe guardarlo para si, a nadie le interese. Si alguna vez voló, y renació cual ave Fénix, al leer un libro, debe guardarlo para si. A nadie le interesa. La belleza esta en los ojos del que mira, dijo alguien muy sabio, pero si el que miro tiene alguna enfermedad no hace falta que hable a nadie de esa belleza. Al parecer no interesa.

Eso parecen decir algunos, digamos, "expertos" en la vida diaria. Aquellas personas que juzgan con la vista antes que con el corazón. Aquellos que gritan sus palabras antes de oír la palabra de quien tiene al lado. Aquellos que no aprecian un silencio ante un cuadro, ni una mirada de nostalgia ante el final de un libro. Esos necios que me juzgan, que nos juzgan, por caminar torpemente con bastón o por no hablar tan deprisa como, ellos, esperan. Esos necios que son incapaces de recordar la sonrisa de un niño, aunque ellos tuvieron esa sonrisa pues fueron niños. No me juzguéis sin saber nada de mi. Dicen que " mas sabe el loco en su casa, que el cuerdo en la ajena". Al menos dejar que mi ojos sigan intentando encontrar la belleza de un escrito, de una palabra, de un cuadro. Como mi ser aún siente el sonido de una bella melodía o mi alma se desnuda ante una sonrisa que intuyo en la palabra de un amigo.

• Mientras escribo esto, estoy escuchando: The Fool On The Hill (The Beatles)