Cuando se rompe lo escrito.


Tembló la voz en mis dedos, palpito de corazón rompiendo las rocas del desamor. Sencilla tristeza que inunda,a raudales,la razón. Fui escrito en arena fina y deshecho por el envite de la mar. Sangre en la noche,tristeza y dolor al despertar. Me contó,una de mis manos, que antaño era agua descendiendo sobre el pedregal, viento entre los risco de la montaña, belleza donde la roca conoció al mar. Me dijo mi otra mano que sonriera al pesar pues tuve tantas caricias como estrellas donde quiera que se pierda,en la noche, el mirar.

Pero,en ocasiones, se me rompe el escrito igual en que la ola se desnuda en la playa,dejando atrás el ancho mar. Se rompe el misterio entre lo que vivo y lo que pienso,entre lo que soy y lo que cuento. Pierdo el camino en mi mente, la poesía en mi piel,la prosa de mi boca. He de rechinar los dientes para volver a morderme el alma con el pensamiento de lo que,el poeta,dejo escrito en una esquina del ultimo de mis huesos. Entonces me despierto del amargo letargo,me levanto y regreso del Walhala. Entonces vuelvo a casa a retomar el escrito. Vuelvo a batallar con la palabra para desmembrar el silencio.

Aquel que dejaran entrever mi palabra escrita, el fuego de mis entrañas. El que lucha por salir del fondo del averno, entre rayos de esperanza, el que dejé apartado en el fondo del escritorio un mal día, cuando la palabra se perdía en mis labios y, como en un terremoto, el escrito se rompía. Aquel que deshizo el hielo que aprisionaba mi corazón, aquel que era recuerdo de lo mucho vivido y el fuego,del olvido, devoró.

Comentarios

  1. José Antonio para ti no se ha hecho el desaliento, así es que no dejes de luchar ni con las palabras, ni con los hechos hay mucha gente que te espera cada domingo para vivir tus poéticas palabras y tus ganas de "desmembrar el silencio"
    Un fuerte abrazo

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  2. Me emociona leer lo que escribes, siempre. No estés triste, las personas como tú hacen más bonito el mundo, más delicado, más dulce, más sabio, más humano (más divino), más acogedor, porque son capaces de dar, de compartir, de entregar alegrías y dolor. El dolor es un misterio pero ¡cuánto enseña! Lo comparto contigo, sé que es muy poquito, que tú lo sientes, nosotros leemos lo que dices, pero de alguna manera, misteriosamente, nos une.

    Como la música, ¡cachis la mar, José Antonio! qué tema es este, no recuerdo el título! y lo he escuchado muchas veces, es muy bonito.
    No pierdas nunca eso que te define, eres lo que cuentas, una gran persona, no podrías escribir como lo haces, sino fuera así.

    No me enrollo. Un beso, p'arriba ¿eh?, siempre p'ariiba, tú sabes mucho de eso...¡¡¡buena semana!!!

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  3. Emocionan tus palabras siempre José Antonio, poco más puedo decirte, tengo inmovilizado el brazo derecho por fisura en el hueso del hombro y me cuesta escribir con la izquierda.
    Un abrazo.

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  4. No sé que decir... Solo me gustaría saber cuanto empezaste a escribir así?? Tiene que ver con la E M?? O ya escribías antes?

    Creo que voy a dejar de leerte, me entristece tanto dolor...

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  5. Es una broma jeje!!!

    Hasta pronto amigo.

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  6. Entiendo que el desaliento haga mella en ti, lo entiendo dentro de mi capacidad de entender lo que ignoro en carne propia y por tanto, sólo intuyo...
    Ya te comenté que tengo una sobrina diagnosticada de esclerosis y ella también tiene bajones de humor, pérdidas de aliento, huídas de sí misma...
    Pero siempre sale a flote como una ola marina en busca del océano.
    La vida es dura, tiene zozobras constantes, pero también tiene porciones de tierra, paraísos donde la voz emerge, los recuerdos sobreviven, las palabras brotan...
    Todo mi ánimo y mi cariño, José Antonio.
    Y mis besos, ¡faltaría más!

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