Epilogo.



Cuando me abandones, vida, recuerda los caminos que hollaron mis pies, la hierba que se balanceo ante mi mirada, la brisa que adormeció mi rostro. Cuando me abandones,vida, recuerda el temblar de mis labios al construir el primer te quiero,el tiritar de mi cuerpo al sentir el primer estremecimiento tras el primer beso. Cuando me abandones, vida, no pronuncies mi nombre...dibuja,por ultima vez,mi sueño. Recuerda como derrote a la montaña,moviendo piedra a piedra la esencia de su nacimiento. Como fui niño, caballo alado y mapa de hombre a medio crear. Cuando me abandones,vida,recuerda mi ultimo suspiro con el que pinte un "hasta luego" entre el deseo y el recuerdo.


Recuerda,vida, que no te abandone ni un instante, que sorbí todos tus versos. Que me hiciste fuerte ante el mañana, efímero ante el ayer. Pero siempre pegado a tu cintura,vida,siempre con las manos prestas al escrito de tu poesía. Cuando me abandones,vida,corre un negro manto sobre mi nombre. Tapa mi recuerdo, que nadie sufra por mi memoria, por lo que fui. Si lo hice medianamente bien,deben saber que quise ser luz y no sombra. Que quise risa y no llanto. Por eso vida,cuando me abandones,pon una canción en sus labios. No les pongas llanto,ni dolor,ni recuerdo.Nada de eso quiero dejarte,vida.una sonrisa trazada con ultimo pincel. Cuando me dejes,vida,pinta nubes azules en coro alrededor del Sol. Ellas sabrán que canción cantarle, se la enseña yo.

Mientras escribo esto,estoy escuchando:Tu me abandonaras en primavera (Clara Montes)

Comentarios

  1. No me gustan los epílogos, sobre todo los de la vida, es como cuando te gusta muchísimo un libro y finaliza...
    No quiero pensar en el mío aunque me gustaría mucho poder escribirlo como tú, dejando de mí, como última pincelada el recuerdo de mi sonrisa, mi afán por ser luz desechando oscuridades, el optimismo tan costoso a veces para sembrarlo en quienes me rodean, mi merodeo constante por la sensibilidad...
    Quisiera que me recordasen sin dolor y en eso vivo, en el permanente anhelo por conseguirlo.
    Me has puesto muy triste leyéndote...soy muy cobarde y le temo al epílogo y esta canción se suma a la sensación de abandono que me trasmite tu escrito y que para nada comparto.
    Así que ya me estás sonriendo y comenzando a escribir un prólogo largo y extenso!
    :)
    ¿Ves?
    Yo te dejo ya una sonrisa incitándote a escribirlo.
    Besos.

    ResponderEliminar
  2. ¡Muy bonito!, sereno, sosegado, tierno. Hay un soneto precioso que dice que entre la vida y la muerte solo existe una coma, una pausa, no existe ruptura, solo una pausa; tras un breve sueño despertamos a la eternidad y la muerte dejará de existir, muerte, morirás.

    Te lo dejo. Soneto Sagrado X del poeta inglés John Donne:

    “Muerte, no te enorgullezcas,
    no te creas poderosa y temible,
    puesto que nada de eso eres,
    porque a todos aquellos a los que creíste abatir no murieron.
    Triste muerte, ni a mí podrás abatir
    (...) Muerte, no te enorgullezcas...
    tras un breve sueño,
    despertaremos a la vida eterna.
    Y la muerte dejará de existir,
    muerte, morirás.”

    Vida, muerte, alma, Dios, pasado, presente. No hay barreras insalvables. No hay puntos y comas. Sólo una coma.

    ¿Quiénes somos?

    "¿Quién soy?
    -Este intervalo de misterio
    entre la rosa ardiente que corto para ti
    y la rosa sombría que mi mano te tiende" (Miguel d'Ors).

    La canción es muy dulce, sosiega.

    Que pases buena semana. ¡Gracias!

    Muchos besos.

    ResponderEliminar
  3. Como me gustan los comentarios de Marinel!! Ella siempre las palabras justas... A mí tampoco me gusta verte de bajón, pero te comprendo. Está ahí... Es parte de ti, por qué no hablar de ello?
    No dejes que nadie condicione tus sentimientos!
    Faltaría más!!!
    Besos

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares