Dibujar un recuerdo.


Me acordé la noche en que me fui a perseguir a las Perseidas y sentí, como remando de paz, las lágrimas en mi cuerpo. Estrellas fugaces las llaman los entendidos, estallidos de brasas quemando mi corazón las llamo desde que una penetro, acariciando mi piel, en lo profundo de ser. Y ahí están los rescoldos recordándome que un día viaje con ellas,igual que viajeste tú aunque no lo recuerdes.

Fue aquel tiempo que fuimos polvo de estrellas, viajando por espacios de silencios atronadores, por espacios de luces cegadoras. Aquellos días que no eran día ni noche sino deseo de que nos hiciéramos la realidad de dos sueños. Viajábamos sin tener conciencia del ser, ni de la vida. Solo el infinito espacio que había entre dos palabras: ser y vagar. Ser nombre o vagar por el infinito misterio.

Quizás eramos polvo de estrellas o caminos de dioses cansados, quizás eramos elfos o historias aun no contadas. Se que vine de los cielos, de allá donde las estrellas lloran escondidas, mueren y renacen. De allá donde dicen que nada hay pero siguen buscando que hay allá. Vine de las estrellas porque, alguien, me llamo acariciando la piel de quien me hizo historia, de quien me despertó del sueño. En ocasiones creo seguir durmiendo, tienen que acariciar mis dedos para seguir escribiendo de donde vengo...porque hay días en los que se están durmiendo. Quizás quieran volver a casa, allá en las estrellas. Hoy escribo muy poco, mis dedos se están durmiendo o,quizás, solo quieren dibujar un recuerdo. Cuando despierten os describiré el recuerdo que dibujaron mis dedos, entre brasas y polvo de estrellas.

Mientras escribo esto, estoy escuchando: "A time for us"

Comentarios

  1. Todos volveremos a ese espacio infinito donde las estrellas fueron y no fueron,donde lloran y ríen y esperan a éstos que habitamos la tierra pensando en ellas,poetizando su espacio,grabando en nuestras retinas su majestuosa soledad.
    Tus dedos, mis dedos,los dedos de todos acabarán durmiendo,pero quizá para despertar al fin de este sueño que es la vida.
    Besos.

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  2. No los dejes dormir, Jose Antonio. Aún te queda muchos recuerdos que contarnos, si no ¿ de qué íbamos a hablar cuando volvamos a nuestros orígenes?

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  3. Entiendo poco de Física, y según las últimas teorías físicas, estamos formados de polvo de estrellas. Decía su formulador: "Somos polvo de estrellas que piensa acerca de las estrellas". Y cuando pienso en silencio, y miro las estrellas, nunca dejo de sorprenderme ante tanta inmensidad, y me sale decir: Gracias, Señor, por tanta belleza. El gran filósofo Kant afirmaba: “Sin Dios no se puede explicar el cielo estrellado sobre mí ni la ley moral en mí”. Eso siento contemplando la maravilla del cielo estrellado. Dicen los científicos que somos polvo de estrellas, yo solo siento una enorme gratitud al contemplar lo que veo, y a la vez me maravilla que las personas sientan y sean capaces de recrear esta realidad de forma poética, porque sabemos pensar acerca de las estrellas, como tú nos dejas en esta reflexión. Decía Quevedo que somos polvo enamorado, y yo así me siento cuando contemplo la belleza alrededor ¡hay tanta!

    Tus dedos te pueden no responder, pero percibo que tu mente permanece siempre despierta, y eso es lo que cuenta. Somos polvo de estrellas capaces de pensar y, sobre todo, de sentir. Ningún ser humano puede dejar de interrogarse, cada día. Es todo demasiado grandioso como para no dar gracias siempre y en cualquier circunstancia, por dura que ésta sea.

    Gracias por este texto, es precioso.
    Espero que tus dedos estén mejor, nunca dejes de admirar y contemplar, es lo realmente importante.

    Que pases un buen fin de semana y mil gracias por compartir tu luz. Busca tu luz. Eres estrella, leí una vez, y así es...

    La música es ¡preciosa!

    Te dejo un texto muy bonito:

    “Tras cada hombre viviente se encuentran treinta fantasmas, pues tal es la proporción numérica con que los muertos superan a los vivos. Desde el alba de los tiempos, aproximadamente cien mil millones de seres humanos han transitado por el planeta Tierra. Y es en verdad un número interesante, pues por curiosa coincidencia hay aproximadamente cien mil millones de estrellas en nuestro universo local, la Vía Láctea. Así, por cada hombre que jamás ha vivido, luce una estrella en ese Universo.” Arthur C. Clarke.

    Y un poema de Gabriela Mistral, una oda a las estrellas:

    Ojitos de las estrellas
    abiertos en un oscuro
    terciopelo: de lo alto,
    ¿me veis puro?

    Ojitos de las estrellas,
    prendidos en el sereno
    cielo, decid: desde arriba,
    ¿me veis bueno?

    Ojitos de las estrellas,
    de pestañitas inquietas,
    ¿por qué sois azules, rojos
    y violetas?

    Ojitos de la pupila
    curiosa y trasnochadora,
    ¿por qué os borra con sus rosas
    la aurora?

    Ojitos, salpicaduras
    de lágrimas o rocío,
    cuando tembláis allá arriba,
    ¿es de frío?

    Ojitos de las estrellas,
    fijo en una y otra os juro
    que me habéis de mirar siempre,
    siempre puro.

    Y al final Shakespeare:

    Somos de la misma materia
    de la que están hechos los sueños...

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  4. Bonito poema nos deja Rosa. Y curioso texto científico, siempre me cuesta mucho seguir ese tipo de conclusiones, que le voy a hacer? Soy una ignorante y por si no fuera bastante, esceptica...

    No dejes que tus dedos te fallen y si pasara, recuerda,
    la que escribe con los ojos...
    Un beso

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  5. Como sé que te gusta la guitarra, mira qué ricos, son muy graciosos, niños coreanos tocando la guitarra:

    http://youtu.be/gSedE5sU3uc

    Espero que te gusten.

    Un abrazo.

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  6. José.... son dolorosas tus letras, tal vez esa fuerza que dices estás perdiendo, sea solo para que te tomes un tiempo y no exijas tanto a tus dedos a volcar todo tu amor en ellas.

    te envio un beso de estrella

    ( desde mi blog estrella solita )

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